domingo, 13 de noviembre de 2011

TAL CUAL

Así, tal cual, llegaron Asun y Lina a mi barrio. Y así denominaron a su diminuto pero coquetón bar: TAL CUAL, al estilo más puramente castizo. No eran los mejores momentos para embarcarse en una aventura, pero le echaron agallas a la cosa, y han sabido capear el temporal. Lamentablemente, la crisis imita a la dama de la guadaña, y no respeta a nadie, ni distingue entre buenos y malos. Desde hoy, domingo día 13 de noviembre de 2011 (¿habrá que creer en el maleficio del número 13?), daré un rodeo para no apenarme con esta contemplación, consciente (y resignado) de que no recibiré el alegre y dulce saludo de mi sobrina LINA, ni me mi contía. Mis mejores deseos.


Por contra, y aún sin motivos de alarma fehacientes, me permito prejuzgar y temer por la calma y seguridad del barrio. Por si no fueran suficientes los bares y supermercados que expenden bebidas alcohólicas a botelloneros de toda edad y pelaje, todo parece indicar que se les quieren facilitar las cosas durante las 24 horas del día, para que no falte de naa. La pregunta y la duda que flota en el ambiente y la mente de los vecinos es si alguien (persona física, colectivo, instituciones...) pretenden reubicar zonas de botellón, y este es un primer paso, con la logística a pie de pista.  El tiempo resolverá las dudas y contestará a las preguntas.





No hay comentarios:

Publicar un comentario